No pienses en qué tecnología usarás, no pienses en la propiedad de lo que creas, no pienses en lo que necesitarás a largo plazo. Piensa en tus usuarios, en tus clientes y en lo imprescindible para su beneficio.
Y desde esa perspectiva, tenemos mucho mucho por pensar…

Porque antes de correr hay que aprender a andar y hay que saber donde poner el foco en tu negocio, para qué te necesita más.
Lo más importante para que un proyecto sea bueno es que, al menos, llegue a ser real.
Una decisión clave a tomar será quién hará ese desarrollo tecnológico.
Desarrollo interno o in-house:
En este caso, el desarrollo se realiza dentro de la empresa promotora del proyecto. El equipo de desarrollo forma parte de la estructura interna de la organización. Esto te permitirá un mayor control sobre el proceso, asumirás un alto riesgo si no tienes los conocimientos necesarios para ello, una comunicación más directa y una alineación más estrecha con los objetivos del negocio. Los recursos y el talento se manejan directamente en la empresa, lo que puede ser beneficioso para la cultura empresarial y el alineamiento estratégico.
Desarrollo externalizado o outsourcing: Aquí, el desarrollo se lleva a cabo por terceros o empresas externas especializadas en el área tecnológica. Estos proveedores externos pueden estar ubicados local o globalmente. Mucho cuidado con las opciones globales o en las que no compartas base cultural. Esta opción puede parecer más sencilla y una reducción de costos operativos, así como rápida al contar con equipos altamente experimentados. Sin embargo, esto podría llevar a desafíos en la comunicación, control de calidad y dependencia de terceros.
La elección entre desarrollo interno o externalizado dependerá de factores como la complejidad del proyecto, la disponibilidad de recursos internos, el nivel de control deseado, la urgencia del proyecto, la experiencia disponible internamente y la sensibilidad a los costos. En algunos casos, se puede optar por un modelo híbrido, combinando equipos internos con colaboraciones externas para maximizar los beneficios de ambas opciones.
Lo primero que debes hacer es pensar al respecto de tu capacidad técnica de partida y de las necesidades de tu proyecto, así como de tu disponibilidad real de tiempo. Priorizar no es opcional en este caso.
En un emprendimiento digital, los tipos de desarrollos tecnológicos pueden ser diversos y se adaptarán según las necesidades del proyecto, necesitarás posiblemente más de uno de los siguientes tipos.
- Desarrollo de aplicaciones móviles: Crear aplicaciones para dispositivos móviles que ofrecen soluciones específicas o acceso a servicios desde dispositivos móviles. Este desarrollo para plataformas iOS, Android, deberás decidir si será utilizando la tecnología nativa de cada sistema o a través de tecnologías multiplataforma.
- Desarrollo web: Creación de sitios web adaptativos, desde páginas estáticas hasta plataformas interactivas y complejas, apoyadas en CMS como WordPress o utilizando lenguajes de programación que permitan crear desde cero una página web para brindar una experiencia óptima al usuario.
- Desarrollo de software a medida: Creación de software personalizado que es necesario para aportarle valor al negocio, ya sea de forma interna o para ser utilizado finalmente por los usuarios o clientes directamente, o integrando ambas partes (el backoffice con el frontoffice). No es demasiado recomendable optar al desarrollo a medida para sistemas de gestión empresarial (ERP), sistemas de pago, herramientas de análisis, entre otros, si no es el verdadero producto de la empresa.
- Desarrollo de e-commerce: Creación de plataformas de comercio electrónico para vender productos o servicios en línea, basadas en software a medida o de terceros, que incluyan integraciones de pagos, gestión de inventario y experiencias de usuario optimizadas.
- Desarrollo de plataformas de contenido: Construcción de plataformas para la creación, distribución y consumo de contenido, como blogs, redes sociales, plataformas de aprendizaje en línea o servicios de streaming. Este tipo de proyectos son de complejidad alta tanto en el desarrollo inicial como en la fase de escalado, se recomienda alta verticalidad y especialización respecto a los contenidos.
- Desarrollo de IoT (Internet of Things): Todos aquellos proyectos donde la creación de sistemas que conectan dispositivos físicos a internet para recopilar y compartir datos, como dispositivos domésticos inteligentes, sensores industriales, entre otros, son la clave.
- Desarrollo de inteligencia artificial y machine learning: Creación de sistemas y algoritmos que aprenden y se adaptan, permitiendo funciones como análisis predictivo, reconocimiento de patrones o asistentes virtuales. Nuevo universo de posibilidades a explotar con la integración vía API de motores de terceros.
Estos son solo algunos ejemplos de los tipos de desarrollos tecnológicos comunes en emprendimientos digitales. La elección dependerá de la naturaleza del negocio, sus objetivos y las necesidades específicas de los usuarios o clientes.

¿Qué puedo hacer por ti?
Emprender en el ámbito de los proyectos con alta carga tecnológica no es sencillo, con frecuencia la sensación de estar perdido te domina y puede llegar a bloquearte.
Contar con un mentor en tecnología puede ayudar a tomar decisiones de forma rápida y efectiva sobre situaciones que producirían muchas dudas e incertidumbre.
Un mentor externo aporta confianza, transparencia y seguridad en la captación de talento, negociación de condiciones con proveedores o futuros socios tecnológicos.
Además, en ocasiones puntuales, puedo liderar la creación de tu propio equipo e incluso el desarrollo tecnológico inicial.
FAQs
Acelera y optimiza tu negocio con un mentor tecnológico de apoyo a tu equipo.
- Enfócate en el núcleo del negocio.
- Reduce costes operativos directos e indirectos.
- Reduce los riesgos inherentes al proceso de desarrollo.
- Incorpora una segunda opinión y visión sin conflicto de intereses.
